Drogas y Alcohol durante el Verano

Juan Carlos Mansilla. Psicólogo.
Córdoba, Argentina, 2001.

juanenlinea@gmail.com
@juanenlina



Cuando llega el verano, y las tan ansiadas vacaciones se pueden concretar, suele ser noticia mas de una vez las consecuencias que acarrea el consumo de drogas o alcohol en exceso.

Las razones por las cuales el verano es una época del año mas propicia para excesos de este tipo, están sin dudas emparentadas con la relajación de las costumbres, la experimentación de nuevas sensaciones, y la presencia de mayor tiempo libre propio del descanso estival.


En este sentido es común encontrar en el relato de jóvenes consumidores de drogas, el recuerdo de que su primer contacto con estas sustancias, o con el alcohol en exceso, se dio en las vacaciones de tal o cual año, y que en ese entonces se decidieron por probar porque estaban lejos de casa, conociendo nuevos amigos y lugares, algo alejados de entorno familiar, y de las propias obligaciones cotidianas.


Lo que estoy diciendo encaja entonces con un aspecto sumamente ligado a las drogas y al alcohol, y que viene a ser una asociación facilitadora de inicio a futuros problemas de drogadicción y alcoholismo, me refiero a la dupla diversión-drogas.


Generalmente se atribuye como una causa principal del consumo de
sustancias, la necesidad que tendría determinada persona de evadirse de una situación que vivencia como angustiante e insoportable. Esta lógica explica por ejemplo al niño que aspira pegamentos para entre otras cosas no sentir hambre ni frío, o el de la mujer de edad que para no contactarse con su angustia recurre repetidamente a la ingesta de psicofármacos, o el del hombre que para superar artificialmente un problema personal decide emborracharse.


Las drogas y el alcohol son en verdad efectivos mecanismos de evasión de los problemas: no solucionan ninguno, aunque crean el espejismo de que por un momento no están ahí.

Sin embargo, el consumo de sustancias como motor para una efímera evasión de los problemas tampoco alcanza por si solo para explicar porqué hay gente que se droga y alcoholiza. Existen muchas otras razones mas.


Una de ellas, es como dijimos, aquella que asocia el consumo de sustancias a la diversión. No por casualidad se dice en la jerga popular “miralo a fulano... ese sí que está enfiestado”, y esto para referirse a alguien que está entre estimulado y groggy, por algo que tomó de más.


Dicen que los antiguos árabes ya entendían esto, y por ello diferenciaron en el circuito de alguien que se alcoholiza distintas etapas: 


  • 1º la del Mono, porque la persona hace monerías, los demás se ríen de él, se vuelve jocoso , y centro de atención obligado.
  • 2º La del León, la persona pasa a la agresividad, no controla impulsos y puede tener reacciones peligrosas.
  • 3º la del Cerdo, porque la persona termina tirada, sucia, y pocos están dispuestos a acercárcele.



En esta clasificación mencionada vemos también a la diversión asociada al consumo de una sustancia. La etapa del “Mono” suponía una entrega a la fiesta, y a la risa.


Es mas, acaso no existe un personaje que por definición resulta cómico y aparece seguido como un personaje central de muchos cuentos cordobeses?, me refiero a la figura del “chupado”, que subió al ómnibus, o entró a la iglesia, o fue al velorio.... y siempre hace reír con sus dichos y actitudes.


De esta manera, socialemente hemos construido una identidad simpática, ocurrente, y a veces hasta tierna, la del “Chupado”, pero que paradójicamente refleja un drama social del que pocos quieren hacerse cargo, el del alcoholismo.


En mayor o menor medida entonces, el alcohol ha estado vinculado a la diversión y la alegría. El primer milagro del Jesús adulto no fue acaso el convertir en vino el agua?, y esto en el contexto de una fiesta de bodas. Los griegos tenían también su especie de fiesta de la vendimia en las fiestas dionisíacas, y los romanos en las bacanales, y estos si que tomaban en el puro sentido de la palabra.


Es decir que ligar la diversión a las drogas y el alcohol (o mejor dicho, alcohol inclusive), no es un dato menor ni un invento argentino sino que tiene que ver con la historia de la cultura y sus rituales.


Por eso el verano es mas que una estación del año en la cual sube la
temperatura ambiente. También es una ocasión privilegiada para la distracción, el esparcimiento y la diversión. Y no es una exageración decir que nos acerca también a los excesos, y que a ciertos grupos sociales los vuelve mas vulnerables al contacto con sustancias psico-activas (drogas).


La estrategia que está detrás de las publicidad que promueve el consumo de bebidas alcohólicas sabe bien de esta relación entre la diversión y las sustancias. ¿Acaso aún en pleno invierno no ve uno propagandas donde chicas y chicos de belleza ideal bailan y beben en la playa, al lado de una tentadora pileta, o en una fiesta sensual?.


Esta asociación también está ligada al avance de las drogas sintéticas, o de laboratorio, de la cual el llamado Extasis es su mayor exponente. Es notable por ejemplo que los resultados de la última encuesta sobre consumo de drogas de EEUU, correspondientes a diciembre de 2000, hablan de una “constante tendencia descendiente” del consumo de drogas ilegales por parte de los jóvenes. 

Sin embargo, si avanzamos en la lectura observamos que contrario al descenso de consumo de LSD, Cocaína y Heroína, que dice experimentar ese país, el informe literalmente añade “Los muchachos consideran que el Extasis es inocuo, cuando en realidad se están haciendo daño de manera grave, -dijo el director McCaffrey-. Destrozan su memoria, su corazón, sus riñones y su sistema nervioso, corren también riesgos de derrames cerebrales y ataques cardíacos. No vale la pena pasarse toda la noche bailando a riesgo de sufrir daños cerebrales permanentes, agregó McCaffrey. 

El enorme aumento del consumo del Extasis es una preocupación
que debe ser atendida, y los anuncios por radio y televisión en la Campaña Nacional Juvenil Contra las Drogas a través de los Medios de Comunicación se concentran en esta nueva amenaza".


¿Porqué este dato del Extasis viene a cuento en este artículo? Simplemente porque el Extasis es una droga “pensada” para ser utilizada en esta nueva modalidad de fiestas bailables interminables, surgidas en Inglaterra a fines de 1980 y que forman parte del movimiento “Rave”. Esta droga entonces funciona como una verdadera usina energética artificial de los participantes que la consumen y que les permite “divertirse” de una manera maratónica.


De nuevo Drogas y Diversión juntas. Y por ello si el verano nos acerca a la Diversión, cosa absolutamente necesaria y buscada, de una u otra manera también nos acerca a las Drogas o al consumo exagerado de Alcohol.


Pero el problema de estas sustancias es que su consumo no queda solo restringido a las fiestas. Nuestra cultura no las regula en ese sentido, como si lo hacían otras. Las drogas y el alcohol en exceso tienen una gran pregnancia en la vida de un individuo y poco a poco van reclamando mayor terreno.


Es como ese alcohólico que empezó a tomar de mas en una que otra fiesta, y luego descubrió que no podía acercarse a una mujer si no estaba envalentonado por al alcohol, y después entendió que pensar una reunión si beber era lisa y llanamente una fracaso, y poco a poco el alcohol fue ocupando lugares impensados, a veces hasta de desayuno.


Divertirse y a la vez conservar la lucidez, ese parece ser el desafío que deberán resolver las nuevas generaciones.




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